Calle 14: noviembre 2011

Una historia del Bronx

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  • 16 noviembre 2011
  • Retroclásica
  • "A Bronx Tale". Robert De Niro, 1993.


    El Bronx, Nueva York, años 60. Lorenzo es un conductor de autobús a quien le cuesta un esfuerzo y muchas renuncias mantener a su familia. Trata de educar a su hijo de nueve años, Calogero, para ser un ciudadano honrado. Pero viven en un barrio en el que impera la ley de la calle, y en una zona dominada por un gángster ilustrado, Sonny. Un día, Sonny mata a una persona en presencia de Calogero, quien le encubre, lo que le lleva al mafioso a convertirse en su protector.


    Calogero emprenderá una doble educación a partir de entonces: la que su padre le da para que "no malgaste su talento", es decir, para que se gane la vida de forma honesta, y la de la ley de la calle, las tentaciones y el dinero fácil representada por Sonny. Lorenzo nunca verá con buenos ojos esa admiración que su hijo siente por el gángster, pero él mismo no es perfecto y también terminará aprendiendo otros valores de su hijo.

    Dos puntos de vista opuestos sobre la ética o la falta de ella, la amistad, la lealtad, los valores de las personas y el crecimiento en un entorno nada fácil.


    Ópera prima de De Niro como director (que encarna aquí a Lorenzo), podríamos decir que es un brillante debut en el que se nota la huella que en él ha dejado Martin Scorsese, con quien ha trabajado en películas como Taxi Driver, Uno de los nuestros, Toro Salvaje o Casino, entre otras. Pero, sin duda alguna, la película se sostiene especialmente en un guión excelente escrito por Chazz Palminteri, que se basa en su propia obra de teatro, y que en lugar de los derechos de autor quiso reservarse para sí la escritura del guión y el personaje de Sonny, que le va como un guante y no sólo por su físico.

    También acompañan la excelente fotografía y una buena banda sonora que atenúa el melodramatismo de la historia, proporcionándole un buen ritmo de acción. Lo más apreciable es que la historia es sencilla y no confunde al espectador con innecesarios embrollos. Se trata de resaltar lo difícil que es ser fiel a unos valores éticos basados en el respeto y la honradez, frente a los placeres que reporta la vida del gángster, en la que también cabe la adoración, la amistad, la admiración; un brillo que puede cegar y provocar a una persona la toma de decisiones en la dirección incorrecta.

     
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